Thursday, December 15, 2011

Pa' toda la Vida

Ha terminado el partido la U ya es campeón y al lado de nosotros dos jovenes se abrazan y uno le dice: Pa' la Vida, Compadre. Ni más ni menos, así será, se ha incorporado uno de los más importantes hitos a la historia Azul.

Campeón invicto, enfrentando siempre a equipos del Atlántico y al más galardoneado equipo del continente en los últimos años, con el goleador del campeonato, de éste y de la historia de la Copa, no perdió un sólo punto de local. Que más se podía pedir o desear?

Aunque en fútbol, nada asegura que hacer las cosas bien dará como resultado el éxito deportivo, acá se hizo mucho bien: acertada la elección del entrenador y su equipo, acertadas las incorporaciones, notable la recuperación de jugadores de la cantera que ya se daban por terminados, un centro de entrenamiento moderno, pero sobre todo muy bien la lección aprendida en la final del Apertura: la modestia y el trabajo van unidos al resultado.

Es un placer ver a este equipo le comenté a un hijo en un ya lejano partido por el campeonato y ese placer se fué agrandando cada semana, acá y afuera, con los titulares y los reservas, por eso cada gol se gritaba con tanta pasión y tanto entusiasmo. Ellos mataban en la cancha, siempre terminaron corriendo más que sus rivales acá, en el Maracaná y en la altura. ¿Como recompensar ese tremendo esfuerzo? con la celebración febril de sus conquistas. Ayer el Nacional estalló tres veces y los recibió con delirio.

Los mayores vimos tantas cuentas saldadas, desde aquel íncreíble error con Peñarol en los 70, el robo en el Monumental de River, otro error de Pinto hace un año, y así suma y sigue.

También se pasó por arriba de la historia de un Estadio que nunca había tenido un equipo chileno como ganador de una final y que el 73 se volvió maldito y oscuro.

Confirmamos también que los chilenos bien dirigidos, bien entrenados, con trabajo, mucho trabajo y disciplina, podían enfrentar de igual a igual a cualquier equipo, incluso de visita con tres delanteros, copando y goleando, con inteligencia y esfuerzo.

Por la tele todo era más tranquilo que en el estadio, así lo vi al repetirme el partido; allá el sindrome de "la Puerta del Horno" estuvo presente hasta que llegó el gol de Lorenzetti y por si faltaba algo, Vargas le puso la guinda..

Por fin la Copa se podía tocar, levantar y admirar, bien ganada, para una campaña como ésta hay que remontarse al Santos de Pelé. Así de simple.

¿ Habrá algo más parecido al cielo?

1 comment:

Sergio Daniel Gomez said...

Qué lindos comentarios! A pesar de no ser hincha de la U y menos fanático de algún club, veo este post lleno de emoción, acertadísimo el título, tanto para el post como comentario al dinal del partido.
A su blog lo encontré dando vueltas por la web y no puede evitar hacer este comentario.
Mis saludos.