Wednesday, August 06, 2008

Más farándula?

Hace unos meses atrás un amigo me sorprendió con un: "Me he acordado de tí Lara h...", el "h..." era para darle más caracter a la afirmación -sáquelo y vea como ella pierde fuerza- ante mi cara de pregunta me lanza un: "es que tú me dijiste hace tiempo: van a echar de menos a Frei". Cierto se lo dije, está anotado en mi breve bitácora de aciertos políticos.
Hoy leo que se ha creado una bancada freista y La Segunda se sorprende ¡quien no! con un discurso pro Frei... de Pizarro el Senador, en pocas horas es posible un desmentido terminante, pero mientras eso sucede, caben ciertas preguntas: otra cosa de ángeles? será que Ascencio y Pizarro unidos jamás serán vencidos?. No, no creo que aquí haya ángeles metidos, más bien todo esto tiene un poco de farándula, que en definitiva ha demostrado que es una de las pocas cosas que hace más felices a los chilenos y la vida se trata de eso de cómo ser más felices: será que nosotros lo hemos descubierto?
El viejo Dahrendorf en uno de sus últimos libros alude a una famosa frase del Primer Ministro británico Harold Macmillan por allá por 1957 "reconozcamos que nunca en la historia nos ha ido tan bien como ahora". Cierto, imaginemos cuanto más 50 años después; seguramente para joder Dahrendorf se pregunta: es verdad, pero somos por ello más felices? y entonces cuales son las condiciones de la felicidad.
La frasecita de Macmillan tambien es cierta en el Chile de hoy pero igualmente la pregunta es válida. No me introduciré en las profundas y exquisitas aguas de Dahrendorf, simplemente creo que hemos encontrado en la farándula el licor de la felicidad. De ahí el placer de escuchar a Bonvalet o Vidal -el ministro- el éxito de las Pamelas y del caballero este de la Querencia y tantas y tantos que se me olvidan... tan injustamente.
Ahuecado el cerebro desaparece la necesidad tan humana para otros de pensar y conducir nuestra vida y de paso ayudar a conducir el país. Unas horitas de farándula y aunque el cuerpo esté cansado nuestra mente estará liviana, increíblemente liviana.
El único problema es que hay quienes con intenciones non sanctas sí están empeñados en que los dejemos conducir nuestros destinos y saben que combinando pan y circo pueden hacer sus cosas tranquilos. A cuidarse los nombrados al comienzo, no están para farandulear.

1 comment:

Anonymous said...

Lo siento, Toñito, pero el angel de la guarda de la DC se jubiló hace algunos años y , por razones que desconozco, el Caballero no le designó reemplazante ( a lo mejor el cupo le pertenece ahora a otro partido)
Un abrazo

Lucho